En el transcurso de las etapas de desarrollo del lenguaje en los niños, cobra una especial importancia el rol de los padres. Usualmente, esta relación afectiva se establece en mayor o menor medida con la madre, aunque la figura paterna es cada vez más importante y definida. Es una relación especial denominada “apego”, que hace referencia al lazo afectivo que una persona establece entre sí misma y el otro, que les impulsa a estar juntos en el espacio y en el tiempo. Precisamente en estas etapas, tanto en la pre- lingüística, como la lingüística, la figura de los papás y mamás toma un papel fundamental.

     Durante el proceso de adquisición del lenguaje -entre los dos y los cuatro años- algunos/as niños/as no tienen consolidados todos los elementos necesarios para poder expresar lo que piensan con agilidad y corrección, incluso se producen alteraciones que se corrigen solas, otras necesitan ayuda para solución o mejora.

     Muchos padres suelen preocuparse por lo que ellos consideran “problemas en el desarrollo del lenguaje de sus hijos/as”. Por eso, aunque cada niño/a evoluciona a su propio ritmo, saber qué es normal y qué no lo es a estas edades, puede ayudar a prevenir precozmente alteraciones y retrasos del habla y, sobre todo, reducir mucho la incertidumbre de los padres.

     Cabe destacar que no hay que dar demasiada importancia a lo que nosotros, como padres, consideramos que nuestro hijo ya debería saber o no saber y mucho menos en el caso de tener hermanos, ya sean menores o mayores. Hacer comparaciones entre ellos puede provocar celos, frustración, ansiedad, etc.,  en el menor.

     Como profesionales, aconsejamos tranquilidad y relativizar los problemas para darle la importancia justa, para ocuparse y no preocuparse;  cada niño evoluciona a su ritmo, hay que esperar, y confiar.

     Dada la importancia que tiene la estimulación temprana para el desarrollo adecuado de todas las áreas evolutivas del niño, en este documento proponemos algunas actividades que ustedes, como padres, pueden realizar en casa, teniendo en cuenta algunas instrucciones básicas para que el desarrollo de la actividad sea lo más amena, fácil y sencilla tanto para los papás como para sus hijos.

     Lo que se pretende es que ustedes, como padres, puedan trabajar los prerrequisitos del lenguaje de una manera más lúdica y partiendo de algunas actividades que un profesional que trabaja con niños elabora día a día, obteniendo unos resultados muy positivos de las mismas.

Contenidos:

  • Relajación activa y pasiva.
  • Soplo: intensidad, duración, control y dirección.
  • Praxias de los órganos bocafonatorios: Mandíbula, labios, lengua y paladar.
  • Praxias faciales.
  • Discriminación auditiva y visual.
  • Memoria auditiva y visual.

Ejemplo de actividades que usted puede realizar en la casa:

Ejercicios de Respiración:

  • Busque el momento del día que usted considere más adecuado para realizar la actividad con su hijo.
  • Antes de realizar cualquier actividad o juego con su hijo es muy importante que hagamos ejercicios de respiración y relajación, ya que con ello se favorece a crear un clima relajado y calmado.
  • Busque, en la medida de lo posible, un entorno adecuado, relajado y tranquilo donde se evite cualquier posible ruido o distracción para su hijo.
  • Siéntense en un sitio cómodo para ambos y siempre frente a él.
  • Realicen los ejercicios de respiración que a continuación se citan.

Ejemplo 1:

Respiración

 Ejemplo 2:

Soplo

Ejemplo 3:

Soplo

Ejercicios para trabajar la conversación con su hijo:

  • Una vez que se haya conseguido que el niño esté relajado/a y tranquilo/a, hágale preguntas referidas a aquellas cosas que se haya hecho durante el día, su hijo también puede preguntarle a usted.
  • Con ello lo que se pretende es mejorar la comunicación de su hijo/a y crear en él o ella la necesidad de contarle a los papás sus inquietudes, intereses, preocupaciones, etc.

Los juegos que se pueden utilizar y que es accesible a todas las familias son:

El señor Potato

Con este juego tan sencillo y básico podemos trabajar diferentes áreas y prerrequisitos del lenguaje como son:

  • Atención Visual.
  • Atención Auditiva.
  • Respeto turno de palabra.
  • Características faciales.
  • Expresión facial.
  • Corrección de algunos fonemas que nuestros hijos tengan una especial dificultad en su articulación o pronunciación.
  • Interacción hijo/padres.

Desarrollo de la actividad:

Se comienza realizando diferentes preguntas:

  • ¿Qué juguete tenemos en la mano?
  • ¿Qué forma tiene?
  • ¿Dónde tiene su carita?
  • ¿Que tiene en su carita?

     Una vez nuestro hijo/a responda a las preguntas que le formulamos (se le ayudará a responderlas lo mínimo posible, ya que es necesario que él/ella se esfuerce un poco y busque su mejor forma de expresión verbal), comenzamos las preguntas referidas a los accesorios que tiene el señor potato y qué función tiene cada uno.

  • Ojos
  • Naríz
  • Boca, dientes o lengua.
  • Orejas
  • Manos
  • Gafas
  • Zapatos o zapatillas.

Ejemplo:

  • Papa dice: María, ¿dónde tiene el señor potato los ojos?
  • María responde
  • Papá dice: ¿Dónde tienes tú los ojos?
  • María responde.
  • Papa: ¿Para qué sirven los ojos?

 El papá o la mamá tratará, en la medida de lo posible, trabajar la capacidad conversacional que tiene su hijo y favorecerlo lo mejor posible.

Ejercicios de Relajación:

1.- Posibles Problemas:

Uno de los principales problemas con los que nos podemos encontrar en el entrenamiento con nuestros hijos es su timidez, que se muestra en los ejercicios de tensar o relajar (especialmente la cara).

2.- Explicación:

A continuación se exponen las principales adaptaciones de la relajación aplicada en niños pequeños con respecto al adulto:

  • Instrucciones más simples y cortas.
  • Las sesiones de relajación deben ser más cortas de lo normal, deben oscilar entre quince y veinte minutos.
  • Hay que controlar más los aspectos ambientales, puesto que los niños pequeños son más fácilmente distraíbles. Se debe intentar que la habitación no presente excesivos elementos distractores y que, en la medida de lo posible, sea silenciosa.
  • Es importante el modelado, por lo que ayuda la presencia de ambos papás.

Ejercicios de Relajación de la Cara:

  • Ojos: Apretar los dos ojos fuertemente, mantenerlos unos segundos y soltamos. Realizar la actividad durante dos ocasiones.
  • Labios: Juntar los labios y apretarlos fuertemente, mantenemos unos segundo y soltamos. Realizar la actividad en dos ocasiones.
  • Frente: Poner la frente como si estuvieras enfadado/arrugándola.
  • Mofletes: Colocar la boca como si fueras a soplar.
  • Orejas: Concentrarse en ellas e intenta subirlas hacia arriba. Esta actividad es bastante complicada para ellos por lo que darles un margen de error de un tiempo más o menos dos días.
  • Cuello: Apretar los dientes muy fuerte. Realizar la actividad en medida de lo posible frente a un espejo.

ORIENTACIONES GENERALES A TENER EN CUENTA POR LOS PADRES EN LA ESTIMULACION DEL LENGUAJE EN SU HIJO

  • Hay que tener en cuenta que su hijo/a es único/a, por tanto hay que respetar sus diferencias individuales. Evitar comparaciones con otros niños de su misma edad o similar.
  • Cuando su hijo/a responda adecuadamente, es conveniente que le dé algún tipo de recompensa.
  • No se debe enseñar al niño cuando es pequeño/a esté cansado/a, inquieto/a o aburrido/a, pues se perdería el tiempo y lo pondríamos en actitud negativa hacia aquello que queremos que aprenda.
  • Recordar siempre que el niño/a aprende por interacción con su entorno familiar y social; a través de imitación y el juego el niño/a adquiere su lenguaje.
  • Póngase a su altura, siéntese, agáchese o póngase se cuclillas si él / ella está sentado/a para poder verse bien entre los dos y favorecer la comunicación.
  • Llámele por su nombre y mírele a los ojos, es decir, establecer contacto ocular.
  • Tenga paciencia con su hijo/a, no anticiparse a lo que él/ella quiere decir, hay que darles tiempo para que se exprese.
  • Aproveche las situaciones de comunicación espontaneas iniciadas con el niño/a.
  • Cuando vaya a hablar con su hijo/a permanezca cerca de él/ella, créele un ambiente alegre.
  • Las actividades o juegos que realicen debe de ser a través de la imitación porque es una manera de que éste/a adquiera su lenguaje.
  • Enseñe al niño/a a prestar atención ante el lenguaje hablado.
  • Hay que ser persistente y háblele siempre correctamente, pronunciando de forma correcta, sin omitir los finales de las palabras o frases.
  • Estimule a su hijo/a para el lenguaje describiéndole situaciones o acciones que le rodea.
  • Imitar acciones sencillas tales como: aplaudir, reír, soplar y mirar.
  • Potencie la buena pronunciación y entonación en su familia, articule más despacio e incluso separe las sílabas y fonemas si fuera necesario para facilitar que el niño/a lo entienda y lo imite.

Vanesa Reyes
Logopeda Centro Atención Temprana «La Cometa»

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